EXPLOTACIÓ INFANTIL
• En el mundo hay 215 millones de niños que sufren explotación infantil y que deben trabajar para sobrevivir
• Más de 115 millones de niños trabajan en las que se consideran las peores formas de explotación infantil
• El 60 por ciento de niños trabajadores, victimas de la explotación infantil, lo hacen en el sector agrícola
La explotación infantil en India
28 abril 2011
Leo en Asia Times
que el reciente asesinato en India de un niño de 10 años, Moin Khan,
cometido por su tío y patrón, ha puesto de nuevo sobre el tapete la
terrible realidad del trabajo infantil en ese país.
La ley india prohíbe el trabajo infantil, pero hay alrededor de 60
millones de niños y niñas que, día y noche, se afanan por conseguir un
mísero sueldo.
Moin tenía solo siete años cuando se despidió de sus padres, en el
estado de Bihar, para ir a trabajar al taller de cigarrillos que su tío
Kalimullah Khan tenía en Delhi.
Kalimullah obligaba a su sobrino a trabajar en turnos de 14 largas y
agotadoras horas, en un apartamento alquilado en el noroeste de Delhi, a
tan solo unos pocos kilómetros del parlamento que ha legislado contra
el trabajo infantil.
El 16 de abril, Moin fue golpeado por su tío con algo contundente
hasta producirle la muerte. ¿Cuál fue el motivo? El niño trabajaba con
excesiva lentitud.
El crimen podría no haberse descubierto de no ser porque un empleado
del crematorio advirtió unos hematomas en el cuerpo de Moin y llamó,
acto seguido, a la policía. Después se ha sabido que ese mismo día
Kalimullah había golpeado a otros niños, aunque no tan brutalmente.
Kalimullah fue detenido el 21 de abril después de que otros dos niños
que trabajan para él fueran rescatados. Uno de ellos era el hermano
mayor de Moin, que es mudo. Ambos reconocieron que el acusado les
golpeaba frecuentemente, tanto a ellos como a Moin. Según otros
testimonios de niños que trabajaban en el taller, los castigos
corporales eran algo habitual si cometían algún pequeño fallo.
“Nos ponía barras de hierro calientes en los pantalones o nos colgaba
boca abajo del ventilador, incluso nos tiraba con fuerza al suelo. No
se nos permitía salir ni hablar con nadie. En total, éramos cinco niños
que trabajábamos en el taller y un adulto que nos controlaba
constantemente”, dijo uno de los niños rescatados.
Hay miles de niños y niñas en India que trabajan en condiciones de
esclavitud laboral, como las de Moin y sus compañeros. La ley,
evidentemente, no se aplica, mientras los funcionarios del gobierno son
sobornados por los patrones. En otras ocasiones, los niños son ocultados
o enviados a sus casas el día que los inspectores llegan al taller.
Las razones por las que estos niños y niñas son empleados son claras.
Son demasiado jóvenes para tener la más leve idea de cuáles son sus
derechos. No protestan, ni presentan reivindicaciones. Pueden ser
contratados por sueldos ridículamente bajos, a veces tan bajos como cero
rupias. Los padres de estos niños son tan pobres que prefieren que
trabajen, aunque sea en esas condiciones y con esos míseros sueldos,
antes de que se mueran de hambre.
Así es cómo la India tiene el triste honor de ser el país con mayor
población infantil laboral del mundo. Algunos obtienen jugosos
beneficios fabricando galletas, cerillas y exquisitos objetos de vidrio.
Son solo unos ejemplos. Muchos de ellos son exportados.
La ciudad sureña de Sivakasi y sus alrededores producen alrededor del
55 por ciento de las cerillas del país. La mitad de sus 60.000
trabajadores son niños menores de 14 años. Algunos empezaron a trabajar
cuando tenían apenas cinco años, en condiciones terriblemente inhumanas.
Trabajan 14 horas diarias en habitaciones sin luz natural, respirando y
manipulando los peligrosos productos químicos con que se fabrican las
cerillas.
A muchos les espera el mismo destino que a Moin o crecer con graves
problemas de salud, generalmente sin cura para unos jóvenes tan
empobrecidos.
- Que podemos hacer para evitar estos maltratos?
- Para que se cumplan de una vez por todas los derechos de los infantes
- Como intervenir o con que recursos podríamos intervenir para reducir la esclavitud y explotación.